
Muchas veces he dicho que a este mundo venimos a comer y a hacer el amor.
Esta afirmación ha tenido mucho sentido durante mi juventud. Pero ahora que los años me están pasando y los efectos de los excesos se empiezan a sentir en mi cuerpo, me doy cuenta de la importancia del balance en la alimentación si se busca vivir mucho tiempo saludablemente.
Haciéndome una profunda observación y mirando alrededor, es increíble cuán irresponsables somos en cuanto a la alimentación, hay cosas como el azúcar y el alcohol en exceso que literalmente son venenos para el cuerpo, pero no pensamos ni un poquito antes de consumir chatarra.
Ahora, al igual que muchos filósofos, yo pienso que ni el exceso ni la abstinencia son buenas para la vida, entonces lo mejor siempre será el balance. El cuerpo tiene la capacidad de desarrollar sus mecanismos de defensa ante cualquier enfermedad, pero tampoco hay que abusar porque los años pasan y el cuerpo se hace más débil, esto es, la condición humana, algún día todos nos vamos a morir. Aun así, creo que es mejor morir con el cuerpo sano y de viejo que morir enfermo y muy joven.
Gracias por pasar…. que tengas un buen día.