
Sócrates mismo decía que él se había casado con Xantipa, una mujer que por naturaleza le gustaba argumentar y que lo trataba mal.
Xantipa la esposa de Sócrates, ha pasado a la historia como una mujer insolente que le gustaba discutir y que de ninguna manera respetaba a su marido. Pero Sócrates en el simposio le cuenta a Platón y a sus otros amigos que el mismo conscientemente había elegido a su esposa por su carácter y espíritu argumentativo, él decía que así como un jinete se entrena con los caballos con más brío, él también aprendía a lidiar con las discusiones con los humanos, que si podía aguantar a su esposa, podría sostener una discusión con cualquier ser humano.
Esto es propio de un filósofo un poco loco sabiendo que significa tener una pareja tóxica, pero, pues, quien soy yo para juzgarlo. En una ocasión dicen que Xantipa lo dejó y se fue con todas sus ropas, que lo dejó desnudo y él tuvo que cubrirse con una piel que encontró por ahí, en otra ocasión se cuenta cómo xantipa echó agua sucia sobre su cabeza y el pobre hombre, sentado e inmóvil como un cadáver, secó su rostro sin atreverse a comentar más que esto: «Antes de que cese el trueno, cae la lluvia.»
Es una certeza que casarse con la pareja equivocada traerá problemas, hablando desde el punto de vista masculino. Desde mi punto de vista, he experimentado en carne propia la necesidad de recurrir a la filosofía para, primero poder entender el razonamiento de la otra persona y luego para superar el dolor y lograr llevar paz al espíritu que se agita como una mera marioneta. Talvez a eso se refiere Sócrates.
Pero también es importante señalar que ser esposa de alguien como Sócrates no era tan fácil, era un filósofo tenía otra esposa y no trabajaba, él no quería aceptar remuneración por su trabajo porque perdería las virtudes de la sabiduría. (en esta creencia discrepan muchos filósofos y yo también). Además, el mismo decía que se sentía atraído a Alcibíades, su alumno, Alcibíades dicen que en muchas ocasiones intentó seducir a Sócrates para acostarse con él y así le transmitiera más sabiduría, (en esos tiempos el amor y el placer no eran propios de hombres y mujeres sino de donde existiera el deseo y era socialmente normal). Según dicen, nunca hubo una relación sexual entre ellos, pero Sócrates le contaba eso a todo mundo, imagino que esto no le gustaba tanto a su esposa.
En fin, Sócrates tiene razón en cuanto a casarse con alguien equivocado, tanto como es cierto que las dificultades te hacen más fuertes y sacan talentos ocultos que de otra forma hubieran permanecido dormidos. En cuanto a ser filósofo amig@ mío, eso es cosa de todos los días.
¡Gracias por pasar!